6 pasos para empezar el día con energía

¿Quieres levantarte con energía, alegría y tranquilidad? Empieza a realizar los siguientes ejercicios desde la cama y da un cambio a tus despertares.

1. Desperezarnos y estirarnos.

Una vez que abrimos los ojos, vamos a tomar aire a la vez que nos estiramos colocando los pies hacia arriba, es decir, llevando nuestros dedos hacia nosotros y vamos tensando todo el cuerpo hasta la parte superior. Las piernas, los muslos, el abdomen, los glúteos, el pecho, los brazos los llevamos hacia arriba o hacia fuera, el cuello e incluso la cabeza. Mientras realizamos este estiramiento que dura unos segundos, hemos mantenido el aire en nuestro abdomen y lo vamos soltando a la vez que relajamos el cuerpo.

2. Masajear los ojos.

Cuando nos despertamos tenemos las manos calentitas, entonces vamos a aprovechar ese calor para colocar las palmas de nuestras manos en los ojos creando como un pequeño vacío entre ambos.

Se trata de acomodar las palmas en los huecos de los ojos y hacer círculos en el sentido horario y después en el contrario con una leve presión con el talón palmar que repetiremos entre 6 y 9 veces.

Posteriormente, colocaremos nuestro dedo corazón o indice sobre el párpado superior y frotaremos suavemente traccionando la piel del mismo repitiendo este movimiento ente 6 y 9 veces.

3. Frotar la cara.

Vamos a calentar un poco más las palmas de las manos y las vamos a colocar sobre los ojos, una vez que notamos ese calor en los mismos durante unos segundos vamos a frotar de arriba abajo y a la inversa nuestra cara de 9 a 15 veces.

4. Cuero cabelludo.

Con las yemas de los dedos, vamos a hacer una leve presión evitando las uñas, y vamos a frotar el cuero cabelludo arrastrando un poco la piel de la frente hasta la nuca entre 9 y 15 veces.

5. Abdomen.

Vamos a colocar las manos, una sobre otra en nuestro abdomen y vamos a subir por el lado izquierdo, seguimos recto por el centro y bajamos por el lado derecho y volvemos por abajo al lado izquierdo de nuevo para volver a empezar el movimiento.

Este masaje lo repetiremos de 9 a 15 veces y lo haremos en este sentido primero y luego en el contrario.

Facilita la digestión y el movimiento de los intestinos, bazo, vesícula biliar e hígado estimulando su función.

6. Piés.

Vamos a frotar con el arco plantar de un pie el empeine y el lado interno del otro hasta que entren en calor y a continuación con el talón de uno masajearemos el arco y la planta del otro.

Vamos a fortalecer glúteos y abdomen además de las fascias plantares y activaremos todos los órganos internos para tener más energía para poner en marcha nuestra actividad.

Después nos levantamos poniéndonos de lado apoyando la mano que tengo encima y empujo para elevar el cuerpo y colocando el otro brazo para terminar de sentarnos en la cama.